Índice de contenidos
- 1 Estrategia Empresarial
- 2 Las 10 claves que aseguran una buena Estrategia Empresarial:
- 2.1 1. Recopilar la máxima información
- 2.2 2. Análisis de las diferentes ideas de Estrategia Empresarial
- 2.3 3. Pensamiento creativo
- 2.4 4. Decisión estratégica
- 2.5 5. Planificación de la Estrategia Empresarial
- 2.6 6. Comunicación y divulgación de la Estrategia Empresarial
- 2.7 7. Ejecución e implantación de la Estrategia Empresarial
- 2.8 8. Análisis de la implantación de la Estrategia Empresarial y retroalimentación
- 2.9 9. Control y seguimiento
- 2.10 10. Innovación o modificaciones
Estrategia Empresarial
Definir una buena Estrategia Empresarial es fundamental para el éxito de cualquier empresa o organización, ya que es la mejor manera de crear y aportar valor a tus clientes, hecho que puede marcar la diferencia en el mercado actual.
La Estrategia Empresarial, debe establecer qué va hacerse y cómo a través de la definición de los objetivos de negocio y de las acciones o recursos que van a utilizarse para ello.
A este respecto, el Cuadro de Mando Integral es la herramienta más usada ya que permite sistematizar la ejecución de la Estrategia Empresarial, con la consiguiente ventaja temporal que esto supone.
Las 10 claves que aseguran una buena Estrategia Empresarial:
1. Recopilar la máxima información
Como paso previo, debe recopilarse toda la información que pueda ser de utilidad para elaborar la Estrategia Empresarial. Esto es:
- Información interna: Referente a los departamentos o áreas que componen la organización.
- Información externa: Rn cuanto al contexto legal y económico de la empresa, la competencia que tiene, etc.
Es esencial realizar este análisis preliminar para evitar el riesgo de fracaso, tanto en la elección de la estrategia, como en su implementación.
10 claves para definir una buena estrategia empresarial y crear valor interno para tus clientes Clic para tuitear2. Análisis de las diferentes ideas de Estrategia Empresarial
Es decir, realizar las simulaciones y estudios que sean necesarios para poder anticiparse a todas las posibles situaciones, ya sean negativas o positivas para la organización.
Con ello, sí se puede elegir la mejor Estrategia Empresarial, de modo que a la hora de la implementación no haya ningún inconveniente.
3. Pensamiento creativo
La mejor opción a la hora de idear la Estrategia Empresarial, es disponer de un equipo multidisciplinar que aporte diferentes puntos de vista. Con ello, se generan productos o servicios fuera de lo convencional, diferentes a sus homólogos en el mercado.
Es decir, disponer de pensamiento creativo y alternativo, de gente talentosa que pueda contribuir con alternativas sorprendentes.
Por supuesto, es fundamental un ambiente distendido y participativo en el cual no exista miedo al fracaso, ya que incluso desde las peores ideas, se puede llegar a una brillante.
4. Decisión estratégica
Por consiguiente, una vez recopilada y analizada toda la información disponible, y de realizar diferentes propuestas de Estrategia Empresarial en base a ella, debe tomarse una decisión.
Es decir, en esta etapa se tiene que aplicar una visión a largo plazo, por lo que se analizan las implicaciones de las alternativas y se decide cuál de ellas escoger.
5. Planificación de la Estrategia Empresarial
Por lo tanto, una vez seleccionada la Estrategia Empresarial de la organización, debe planificarse su implantación. Para ello, se siguen los pasos siguientes:
- Identificación de riesgos o posibles inconvenientes no contemplados con anterioridad para, llegado el caso, poder anticiparse.
- Definir qué es aquello que hay que asegurar. O sea, lo que pueda considerarse como clave para el éxito de la estrategia.
- Estipular la metodología de trabajo para ejecutar la estrategia y las tácticas que van a utilizarse para ello.
- Asignar responsables para cada una de las actividades o tareas que se van a realizar para la ejecución de la Estrategia Empresarial.
- Establecer plazos para el desarrollo e implementación de las estrategias.
Por consiguiente, esta es una de las etapas más tediosas a la hora de abordar la Estrategia Empresarial, además de la más importante para su desarrollo y funcionamiento futuros.
6. Comunicación y divulgación de la Estrategia Empresarial
La comunicación y divulgación de la estrategia deben estar bien diseñadas para asegurar que los pasos anteriores de selección y ejecución de la estrategia tengan sentido.
Por tanto, sería preferible la planificación del proceso de comunicación y divulgación como método para asegurar el éxito de la planificación de la estrategia elaborada anteriormente.
7. Ejecución e implantación de la Estrategia Empresarial
Así, una vez que se sabe qué quiere hacerse, cómo se va a llevar a cabo y qué se va a comunicar, es posible ejecutar e implementar la Estrategia Empresarial seleccionada y planificada.
En este punto, contar con personal cualificado, con iniciativa, autoridad y experiencia es imprescindible para que no altere la estrategia que se está ejecutando.
8. Análisis de la implantación de la Estrategia Empresarial y retroalimentación
Esto es, una vez puesta en marcha la Estrategia Empresarial, debe analizarse qué etapas de la planificación han sido desarrolladas y cuáles no. Por lo tanto, consiste en el aseguramiento del buen funcionamiento de la planificación estratégica diseñada.
Entonces, es aquí donde se deben detectar los posibles errores y subsanarlos, aprendiendo de ellos y aprovecharlos para mejorar (retroalimentación).
9. Control y seguimiento
Finalmente, es en esta etapa en la que disponer de un buen plan de control y seguimiento de la Estrategia Empresarial implementada.
Por tanto, el diseño de un buen Cuadro de Mando es fundamental. De este modo, se recibirán notificaciones y avisos cada vez que se produzca algún tipo de variación sobre la planificación.
10. Innovación o modificaciones
Finalmente, entran en juego la mejora continua y la innovación. Esto es, mantener un producto idéntico durante el tiempo, no siempre funciona, y menos en el mercado actual.
Se debe estar en continuo movimiento y aprendizaje, adaptando el producto o servicio a las necesidades y expectativas de los clientes, mejorándolo a través de la innovación y modificándolo según cambie la demanda.